No es cualquier prenda,
ni cualquier tela ni cualquier coleccion.

Oldi no conoce de producción en serie, no sabe de rebajas masivas ni de prendas maltratadas. Cada pieza es sembrada con paciencia y cosechada en el momento justo, cuando florece, ni antes ni después.

Todo lo que hacemos nos cuesta mucho, pero también lo vale mucho. Tenemos opciones. Podríamos ofrecer productos rápidos, “testeados” y con un diseño socialmente aprobado. Pero no apuntamos a eso. 

No sólo porque nos gusta crear desde un lienzo en blanco, sino también porque somos conscientes de a lo que lleva la adquisición sin propósito. No elegimos consumo masivo, elegimos consumo a consciencia.

La prenda, fiel.
El estilo, simple. El toque, único.

Elegimos oficio.
Vos, calidad.

Designer & Founder